miércoles, 8 de julio de 2009

Soledad

Camino lentamente en las calles de valdivias, donde el frio y el viento corren como niños,
mis manos estan congeladas por el clima enrarecido de una ciudad perdida, mi ojos se pierden entre las luces de los vehiculos, mis oidos se saturan con el ruido de la agitacion, mi nariz helada sufre cada vez que respiro, humedeciendo mi nueva vieja bufanda, obsequio de un amor, lo recuerdo, son muchos momentos... La noche cae, mi cuerpo se enfria, tiembla por la lluvia que comienza a regalar vida por doquier, y nosotros, ingenuos corremos de ella, milagro del mismo cielo.

Pienso en ella, en aquella tambien, ¿donde estaran?, ¿que estaran haciendo?,¿estaran bien?, eso espero... espero su felicidad.

Recuerdo mi historia, mis caminos, mis experiencias, mis pequeñas vidas. Un mareo. El cielo tiembla, ilumina la ciudad, despierta y refleja mi corazon.

Es verdad que esto no tiene sentido...


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